La inteligencia artificial salta a las canchas
Atrás han quedado las épocas en las que se apelaba a una mascota para determinar el posible resultado de un partido de fútbol, los árbitros tomaban decisiones solamente apoyados en un golpe de vista o los técnicos determinaban sus tácticas únicamente por su conocimiento empírico.
Ahora, el deporte más popular en el mundo también es jugado por la inteligencia artificial, que aún no marca goles, pero cada vez está más cerca de influir en los marcadores de los encuentros.
La inteligencia artificial revoluciona el fútbol. Estos son algunos de los ejemplos en los que la IA ha entrado a jugar un papel cada vez más importante en el planeta fútbol:
Arbitraje inteligente
Si estás viendo los partidos de la Eurocopa 2024, quizá te has encontrado con una suerte de electrocardiograma en medio de las retransmisiones. No es otra cosa que la señal que emite el balón al ser tocado por un jugador.
Adidas creó una pelota con un microchip dentro, que permite identificar los contactos con la mano.
Además del chip, el esférico llamado Fussballliebe cuenta con tecnología de seguimiento de extremidades que permite la creación en tiempo real de imágenes 3D de los protagonistas. Las cámaras que nutren a la señal televisiva del partido captan el movimiento de los jugadores, así como el instante preciso y el punto de contacto entre el futbolista y el balón.
Esta innovación ayuda a los árbitros determinar, por ejemplo, si en una jugada el balón impacta en la mano de un defensa dentro del área y debe señalarse una pena máxima.
Análisis de rendimiento
El big data está hoy en la agenda de todos los técnicos del mundo. Pases, intensidad de movimientos, distancia recorrida, zonas de ocupación, estado físico… cada vez hay mas información sobre los jugadores dentro y fuera del campo, la cual es provista por la inteligencia artificial.
En las sesiones de entrenamientos y en los partidos, los jugadores están monitorizados mediante sensores y cámaras, que arrojan datos de todo tipo. Estos son analizados en tiempo real y a posteriori por la IA para evaluar el desempeño de los futbolistas.
Observa en este video un ejemplo del análisis en un partido en tiempo real:
Por otra parte, Google DeepMind, como parte de su colaboración plurianual con el Liverpool FC, desarrolló un sistema de inteligencia artificial completo que puede asesorar a los entrenadores sobre los tiros de esquina.
TacticAI es un sistema de IA que puede brindar a los expertos información táctica, en particular sobre los córneres, a través de una IA predictiva y generativa.
TacticAI logra resultados de vanguardia mediante el uso de un enfoque de aprendizaje profundo geométrico para ayudar a crear modelos más generalizables.
(A) Cómo se convierten las situaciones de tiros de esquina en una representación gráfica. Cada jugador se considera un nodo en un gráfico. Una red neuronal gráfica opera sobre este gráfico actualizando la representación de cada nodo mediante el paso de mensajes.
(B) Cómo procesa TacticAI un tiro de esquina determinado. Las cuatro combinaciones posibles de reflejos se aplican al tiro de esquina y se envían al modelo central de TacticAI. Interactúan para calcular las representaciones finales de los jugadores, que se pueden utilizar para predecir resultados.
Resultados y porcentajes
Antes teníamos que esperar a que el pulpo Paul, el tapir Manolo, el gato Aquiles o el armadillo Norman predijeran los resultados para saber si podíamos esperanzarnos con el partido de nuestra selección. Y ahora en la Eurocopa está de moda el perro Fury; sin embargo, hay nuevos métodos más tecnológicos que sirven para intentar predecir lo que va a pasar en los partidos.
Los algoritmos de la IA permiten comparan el desempeño de los equipos, sus fortalezas y sus debilidades, para hacer una aproximación sobre las posibilidades de éxito de cada uno, con lo cual la inteligencia artificial revoluciona el fútbol en los últimos años.
Asimismo, durante los partidos se ha puesto de moda el xG (goles esperados), que analiza factores como el histórico de anotaciones de los jugadores, así como su técnica de tiro, su distancia del portero o la cercanía de la defensa para estimar si se va a producir un gol.
(Lee aquí: El futuro de la conducción autónoma y la robótica)